A solo 40 minutos de Querétaro, se encuentra una pequeña ciudad virreinal cercana a la Sierra Gorda. Con un delicioso clima templado durante la mayor parte del año, Tequisquiapan es un excelente destino para descansar, degustar buen vino y vivir toda una experiencia en las alturas.
¿Qué hacer en el día?
El fin de semana ideal en este pueblo mágico comienza al amanecer, con un viaje en globo aerostático. Los recorridos se hacen a las 7 de la mañana, todos los días del año (siempre que haya buen tiempo) y tienen una duración aproximada de una hora.
Al volver a tierra, puedes iniciar un paseo por las calles adoquinadas y disfrutar de un buen café en el Rincón Austriaco. Alrededor de la Plaza Miguel Hidalgo, se alzan pequeñas casitas con fachadas coloridas y hermosas balconerías. En varias de ellas encontrarás restaurantes, cafeterías, bares y boutiques.
También puedes visitar el parque La Pila, famoso por sus enormes ahuehuetes y la tranquilidad de sus paseos. En el corazón de este lugar, podrás observar una pila de agua que abasteció a la Hacienda Grande durante el Virreinato.
Un viaje gourmet
Tequisquiapan ofrece muchas opciones para los viajeros, pero si cuentas con poco tiempo tendrás que elegir. Por ejemplo, puedes reservar un tour por la Ruta del Queso y Vino, la cual te llevará a conocer las cavas de Freixenet, una de las casas vitivinícolas más importantes de América Latina, que elabora vinos espumosos en cavas situadas a 25 metros bajo tierra. El recorrido continúa por la Finca Vai, productora de jocoque y quesos frescos estilo ranchero, oaxaca y panela. Para terminar, visitarás los Viñedos La Redonda, famosos por su bella simetría y la paella que sirven.
A los alrededores de la ciudad, se encuentran otras fincas con viñedos por los que puedes pasear a caballo. Algunos de los más conocidos son los Viñedos Azteca, Viñedos Los Rosales y Viñedos del Marqués. Todos abren sus puertas al público para catar un buen vino y conocer el proceso de elaboración de esta bebida. No olvides hacer previamente tu cita.
Para relajarse
Por sus características geológicas, este pueblo mágico posee albercas naturales de las cuales brota agua del subsuelo con una temperatura mayor a los 25 grados centígrados. Puedes pasar un día en alguno de los balnearios de aguas termales, relajarte en el spa del Hotel Boutique Villa Florencia (excelente recomendación para hospedarte) o jugar en el campo de golf.
Los hoteles Suites Poza Real y Hacienda Las Delicias ofrecen a sus huéspedes pozas de aguas termales privadas.
¿Dónde comer?
Por su gran actividad turística y cercanía con la capital del país, Tequisquiapan tiene una diversidad culinaria interesante. Hallarás desde pequeñas trattorias italianas hasta restaurantes de comida mexicana.
Te recomendamos hacer una parada gastronómica en Capricho’s, un establecimiento de cocina franco mexicana que destaca por su sazón y buen ambiente.
Ahora, si lo que quieres es deleitarte con el sabor de la cocina tradicional queretana, no puedes dejar de visitar K’puchinos.
De noche…
Las noches en Tequisquiapan son excelentes para quienes disfrutan de lo bohemio y el vino a media luz. Su variedad de bares y antros hará que pases una noche inolvidable.
También puedes ver el espectáculo de fuentes danzantes al lado del monolito de la Peña de Bernal.
No te vayas sin
- Adquirir alguna artesanía de mimbre en el Mercado de Artesanías de la calle Carrizal
- Probar el pan de queso de La Charamusca