Cada 15 de agosto, se celebra el Día Mundial del Reiki, una jornada dedicada a reconocer y difundir los beneficios de esta terapia energética que ha ganado popularidad en todo el mundo.
¿Qué es el Reiki?
El Reiki, originario de Japón, es una técnica de sanación que utiliza la imposición de manos para canalizar energía universal hacia el cuerpo, promoviendo el bienestar físico, mental y emocional.
Asimismo, es conocido por su capacidad para reducir el estrés y la ansiedad. Creando un estado de profunda relajación que permite al cuerpo activar su capacidad de autocuración. Esta terapia se basa en la creencia de que la energía vital fluye a través de nosotros, y cuando este flujo se interrumpe, pueden surgir enfermedades o malestares.
Mediante sesiones de Reiki, los practicantes buscan restablecer este equilibrio energético, ayudando a liberar bloqueos que afectan la salud.
¿Cuáles son sus beneficios?
Además, diversos estudios han explorado los efectos del Reiki en la salud. Destacando su impacto positivo en la reducción del dolor, especialmente en pacientes con enfermedades crónicas o en procesos de recuperación postoperatoria.
A su vez, el Reiki ha sido utilizado como complemento en tratamientos médicos tradicionales. Ya que contribuye a mejorar la calidad del sueño, reducir la presión arterial y fortalecer el sistema inmunológico.
Por otro lado, uno de los mayores beneficios es que puede ser aplicado en cualquier lugar y no requiere equipos especiales. Lo que lo convierte en una terapia accesible para personas de todas las edades y condiciones físicas.
Su enfoque holístico permite abordar no solo los síntomas físicos, sino también el bienestar emocional y mental. Ofreciendo una sensación de paz interior y claridad mental.