En la ciudad de San Miguel de Allende, se alza un restaurante que fusiona la pasión por la cocina con la destreza culinaria de un chef internacionalmente reconocido. Hacmans by Dante Ferrero, ubicado en el Hotel Amatte, es un refugio gastronómico que trae a la mesa lo mejor de la cocina a la leña con toques cautivadores.
La misión fundamental del chef en este nuevo restaurante es elevar la cocina con técnicas culinarias centradas en el uso de leña y humo. El resultado es una oferta gastronómica que celebra la simplicidad y la autenticidad de los ingredientes con cortes de carne de alta calidad, todos cocinados a las brasas.
Con una pasión palpable por la cocina, Dante Ferrero pasó de Argentina hasta México, donde encontró un nuevo hogar para seguir creando. Cuenta que, aunque su intención inicial no era convertirse en chef, su amor por la gastronomía lo llevó a explorar el mundo culinario en la ciudad de Monterrey.
“Soy partidario de las técnicas básicas, toda la parte de cocción con fuego, con brasa, y de lo sencillo, cocinarlo lo mejor posible. Para mí, lo más importante es que la gente disfrute, que coma rico y de la mejor calidad posible”, comenta el chef.
Rendir tributo a los orígenes
Con el tiempo, su enfoque se centró en resaltar la calidad de los ingredientes a través de técnicas básicas y la cocción en brasa, lo que lo ha llevado a ser considerado “gurú de la carne”.
La influencia de su herencia argentina se entrelaza con su experiencia en Monterrey y otras zonas de México, resultando en una cocina que honra la carne, pero también abarca otros ingredientes y técnicas culinarias. Su devoción por cocinar animales enteros a la brasa se ha convertido en un ritual que encanta a los comensales y presenta desafíos constantes.
“El tema de hacer la vaca entera me ha paseado por todo México. He hecho lo que la gente llama ‘el show de la vaca’, o ‘la vaca es mía’. Hice mi vaca número 80 para anunciar mi llegada a Hackmans en Amatte. Hicimos un gran evento, fue la primera vaca que hice en un rooftop”, cuenta.
Para uno de sus platillos estrella, se cocina un animal entero de alrededor de 300 kilos, lo que conlleva casi 24 horas en preparación, cocción y servirlo, por lo que se pasan muchas horas alrededor del fuego, esperando a que esté listo.
“Lo que en algún momento hice como un desafío personal hoy se ha convertido en un ritual. Lo que más me gusta es lo que produce la gente, el que la gente quiera estar ahí, que se asombre con un animal tan grande cocinándose durante 24 horas, el que todos estemos esperando un pedazo de carne de la manera más primitiva. Disfruto esa parte de ritual que tiene, de todo lo que significa asar una vaca entera”, agrega Dante.
Un imperdible en San Miguel de Allende
La apertura de Hacmans en el Hotel Amatte representa un nuevo capítulo en la carrera de Dante Ferrero. El entorno tranquilo y las vistas impresionantes se fusionan con su estilo culinario, ofreciendo a los visitantes una experiencia gastronómica única.
Desde el uso de la leña y el humo hasta la pasión por la carne y la variedad de ingredientes locales, cada aspecto de Hacmans refleja el enfoque de Dante Ferrero en brindar una experiencia culinaria genuina y memorable.
“Me encanta la idea de tener algo en San Miguel; la propiedad y el lugar me parecen increíbles. Tenemos una terraza con un atardecer precioso, hay asadores[…] Somos una gran opción, un oasis; nuestra ubicación nos permite estar alejados del bullicio del centro de San Miguel de Allende, en un lugar con grandes vistas”, agrega.
La influencia de Dante Ferrero se extiende más allá de las paredes de su restaurante. Su participación en programas y diversos eventos culinarios ha impulsado su reconocimiento y lo ha consolidado como un referente gastronómico. Su compromiso con la excelencia culinaria y su constante evolución lo han llevado a crear experiencias que van más allá de lo ordinario.
En cada plato que sale de su cocina, Dante Ferrero comparte su amor por los ingredientes de la más alta calidad y las técnicas culinarias auténticas. En este rincón de San Miguel de Allende, los comensales pueden esperar no sólo una comida, sino una experiencia que celebra la riqueza de la gastronomía y la habilidad de un chef apasionado.
