En el marco de Talent Land, una conferencia que atrae a los innovadores y pensadores más destacados en tecnología y ciencia, Líder Life conversó con Eduardo Soriano Ramírez, neuropsicólogo que está redefiniendo los límites de la psicología clínica con la ayuda de la Realidad Virtual (RV).
Antes de adentrarse en el mundo de la RV, Soriano Ramírez comenzó a explorar la fusión de tecnología y psicología a través del neurofeedback.
Este enfoque permitía al especialista observar en tiempo real cómo las frecuencias cerebrales afectan nuestros estados mentales. Por ejemplo, frecuencias altas durante períodos prolongados podrían indicar ansiedad. “La pregunta era cómo podíamos ‘desacelerar’ el cerebro, equilibrarlo y salir de estados de ansiedad“, compartió.
La aplicación de neurofeedback en terapia psicológica, medición de la actividad cerebral para desarrollar tratamientos, fue solo el inicio. La RV se presentó como una evolución natural de su trabajo, ofreciendo una herramienta aún más potente para ayudar a los pacientes a alcanzar estados de estabilidad mental.
“Uno de los desafíos más grandes para los psicólogos es cómo disminuir la dependencia de la imaginación del paciente en la terapia. Con la RV, podemos hacer que lo imaginativo se vuelva tangible, lo que potencializa y focaliza el tratamiento en los sentidos y el cuerpo del paciente“, explicó Soriano Ramírez.
Con más de un año incorporando el enfoque clínico de la RV en la psicología, Soriano Ramírez forma parte de un pequeño grupo de pioneros en México que están comenzando a ver resultados prometedores.
A pesar de que en países como Estados Unidos esta tecnología se ha explorado durante aproximadamente 15 años, el acceso limitado a equipos costosos había restringido su aplicación a hospitales y centros de investigación. Hoy en día, gracias a los avances tecnológicos, los dispositivos de RV son más accesibles, permitiendo su uso en un espectro más amplio de entornos clínicos.
La tecnología de RV se está volviendo una inversión valiosa para muchos, con sesiones que comienzan desde los 400 pesos, dependiendo del número de sesiones terapéuticas necesarias.
Soriano Ramírez compartió el caso paradigmático de un paciente con TDAH: “Un niño que constantemente era regañado en la escuela ha mostrado una mejora significativa en su atención después de la terapia con RV. Es uno de los casos más impresionantes, ya que después de 4 o 5 años en otras terapias sin resultados, hemos visto una mejora notable“.
La RV no solo mejora la calidad de vida de los pacientes al lograr una estabilidad emocional y bienestar personal, sino que también tiene un impacto positivo en el entorno familiar, aliviando la carga de los cuidadores.
La visión a largo plazo de Soriano Ramírez es clara: especificidad en los tratamientos. “Poder generar entornos más específicos para ciertos trastornos nos permitirá trabajar de manera más acelerada, ofreciendo tratamientos personalizados más rápidos y efectivos“, afirma.
