La capoeira, arte marcial afrobrasileño que combina movimientos fluidos y acrobacias con música y ritmo, ha sido parte integral de la vida de Juan Carlos Martínez, director general del despacho 449.
Su historia con la capoeira comenzó como una búsqueda de complementar sus habilidades físicas. Atraído por la agilidad y la versatilidad que la capoeira podría aportar a su juego, comenzó a explorar este arte en la Preparatoria Tec de Monterrey, en Aguascalientes. Bajo la tutela de varios maestros y grupos, Juan Carlos se sumergió en este mundo, aportando su pasión por la música y la creatividad a este arte marcial único.
Su travesía en la capoeira también refleja una historia de evolución y adaptación. Siendo la espera y la resiliencia propias de esta disciplina, dichos conceptos dejaron una huella en la vida de Juan Carlos: con su enfoque en el timing y la observación, ahí aprendió la importancia de la paciencia y la capacidad de esperar el momento adecuado para actuar.
Esta lección, aprendida en el contexto de la roda de capoeira, se convirtió en un pilar fundamental en su enfoque empresarial: “La capoeira es un proceso constante de superación[…] Todo el tiempo tienes que ver cuáles son tus umbrales de resistencia, creatividad, pensamiento y, por supuesto, físicos”, comenta.
Juan Carlos reconoce que el éxito no se trata de prisa y presión, sino de una planificación estratégica y de la capacidad de aprovechar el momento oportuno para asestar golpes o tomar decisiones que den en el blanco.
Integralidad, clave para mundo empresarial
La integralidad inherente a este arte marcial brasileño también encontró lugar en su vida empresarial. Al frente de 449, Juan Carlos lidera un equipo multidisciplinario con una variedad de habilidades y perspectivas. Al igual que en la capoeira, donde se mezclan aspectos físicos, mentales y creativos, su equipo se complementa para abordar los desafíos financieros desde diferentes ángulos.
“La capoeira desarrolla cierta integralidad multidisciplinaria: temas físicos, mentales, artísticos o de creatividad. Se envuelven muchas disciplinas en una sola y, en realidad, ese es el éxito para muchos casos de emprendimiento: mientras tengas equipos multidisciplinarios con diferentes características, puedes cumplir ciertos objetivos muchísimo más fácil”, relata.
Además de la paciencia y la integralidad, la comunidad y el sentido de pertenencia que la capoeira fomentó en su vida fueron logros destacados para Juan Carlos. Consolidar una comunidad de capoeiristas en Aguascalientes, con eventos y actividades que atrajeron a personas de diferentes lugares, se ha convertido en uno de sus mayores orgullos.
Esta habilidad para construir conexiones y crear un ambiente inclusivo también resonó en su labor empresarial, donde se esfuerza por construir una comunidad de colaboradores comprometidos y diversos.
Futuro entrelazado entre capoeira y crecimiento empresarial
Mirando hacia el futuro, Juan Carlos aspira a equilibrar su pasión por la capoeira con su crecimiento empresarial. Su objetivo de participar en el mundial de capoeira refleja su deseo de desafiarse a sí mismo y buscar nuevas experiencias en este arte. Sin embargo, comprende que esto viene con la responsabilidad de entrelazar sólida y armoniosamente al despacho de 449 y la práctica capoerística.
