La vinícola familiar Casa de Quesada ha logrado reconocimiento internacional por su dedicación y calidad en la producción de vinos. Fundada por Patricio de Quesada como un proyecto personal, la bodega ha crecido para convertirse en un referente en la industria vitivinícola mexicana. Con un enfoque en la sustentabilidad y la innovación, destaca por la filosofía de producir vinos excepcionales que reflejen las características únicas del terruño de Aguascalientes.
Con una ubicación privilegiada a mil 970 metros sobre el nivel del mar, la vinícola se ha destacado por su dedicación y cuidado en la producción de vinos de alta calidad en lotes pequeños. Además, su rigor y alta calidad vigorizan la tradición vitivinícola de Aguascalientes, y recuerdan los versos de Borges que rezan: “Vino, enséñame el arte de ver mi propia historia / como si esta ya fuera ceniza en la memoria”.
Recientemente, la bodega ha ganado reconocimiento internacional, especialmente en el prestigioso concurso Decanter, donde su vino Indómito Syrah Viognier obtuvo la única medalla de oro para México. Este logro subraya el compromiso de Casa de Quesada con la excelencia y su capacidad para competir en el escenario global. Además, ha recibido otras medallas en concursos como Bacus, en España, y el International Wine Challenge, en Londres, consolidando su reputación como uno de los mejores productores de vino en México.
“El vino que ganó el Decanter es un Syrah Viognier. Este vino hace honor a nuestra pasión por hacer cosas diferentes e innovadoras. La línea de Indómito en particular es muy distinta a lo que hay en el mercado. Tiene mucha personalidad, pero también es muy artesanal. Es un vino muy distinto, porque es un vino 90% Syrah, una uva tinta, y 10% Viognier, que es una uva blanca. Es una técnica que se utiliza en algunos lugares de Francia, por ejemplo en el Roda, aunque no en estos porcentajes. En México, supongo, somos los primeros que lo hacemos”, comparte.
Novedad y sustentabilidad
Casa de Quesada se compromete con la sustentabilidad, utilizando técnicas agrícolas preventivas y biológicas. Su enfoque se centra en mantener las plantas saludables a través del uso de microorganismos benéficos y la correcta nutrición de la vid. Al evitar pesticidas y productos químicos, prefieren métodos naturales que conservan la biodiversidad del suelo.
“En nuestros viñedos fomentamos la viticultura sin pesticidas ni químicos. Utilizamos productos que cuiden la tierra. Queremos hacer una agricultura preventiva y utilizar sólo el agua necesaria. Hacemos uso de la misma microbiología del lugar, bacterias y fauna, en general, que se encargan de combatir otras bacterias perjudiciales. A través de una nutrición adecuada, mantenemos a las plantas sanas y fuertes para combatir cualquier eventualidad.”, asevera Quesada.
Además, la bodega está equipada con tecnología moderna, pero muchos procesos siguen siendo artesanales. Esto les permite un control detallado y un cuidado meticuloso en cada etapa de la producción.
Los enólogos de Casa de Quesada, Fabricio Hernández y Agostina Astegiano, cuentan con una vasta experiencia en la industria. Ellos han aportado una visión moderna a la enología de la bodega, enfocándose en producir vinos frutales y bien balanceados, alejándose de los estilos más pesados y astringentes tradicionales de Europa.
La filosofía de Casa de Quesada se centra en la calidad y la búsqueda constante de la excelencia. Se toman riesgos calculados para crear vinos que sorprenden y superan las expectativas más altas. Su enfoque en las características únicas del terruño aguascalentense se refleja como un crisol en todas sus etiquetas: Estoico, Indómito y Eszencia.
“Queremos demostrar que en Aguascalientes se pueden hacer vinos que compitan con cualquier vino de México y del mundo. Esa es la filosofía, no tanto hacer mucho vino, sino hacer vino de mucha calidad, hacer procesos que cuiden y resalten las características naturales del terreno de Aguascalientes para consolidar una identidad propia”, dice.
Hacia el futuro de la cultura vitivinícola
A corto plazo, Casa de Quesada se enfoca en dar a conocer el vino de Aguascalientes y fomentar su consumo. Esto incluye colaboraciones con restaurantes, hoteles e industrias turísticas tanto dentro como fuera del estado.
En términos de infraestructura, a mediano plazo, busca desarrollar proyectos que aumenten la calidad del vino. Esto incluye la creación de laboratorios y la mejora de técnicas enológicas. La profesionalización de la industria es clave, y para ello están en contacto con universidades para mejorar los programas educativos relacionados con la vitivinicultura. A largo plazo, el objetivo es posicionar a Aguascalientes como el productor de vino de mayor calidad en México.
Además, Casa de Quesada está próxima a lanzar una nueva etiqueta, Épico, una mezcla bordalesa de Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc y Merlot. Este vino ha pasado 20 meses en barrica y requiere al menos un año en botella para estabilizarse. A pesar de no estar completamente listo, fue enviado a dos concursos, ganando medallas de oro en ambos. Épico es considerado el vino mejor logrado de la bodega hasta ahora y se espera que esté disponible en el mercado a finales de este año.
Un nuevo Consejo
Otra de las iniciativas que lidera Patricio Quesada es la conformación del nuevo Consejo Vitivinícola de Aguascalientes. Este consejo está integrado por doce vinícolas: Casa de Quesada, Tierra Tinta, El Secreto, El Aguaje, Hacienda de Letras, Valle Redondo, Casa Leal, Bodegas Bonart, Sarmiento, Santa Mónica, Casa Leal y Parón de María.
Dicho Consejo busca unir esfuerzos para enfrentar los desafíos comunes y establecer una agenda de desarrollo a mediano y largo plazo. La iniciativa tiene como meta principal fomentar la unidad en la industria vinícola del estado y trabajar en conjunto para alcanzar los objetivos compartidos de crecimiento y reconocimiento.
Patricio de Quesada, primer presidente del Consejo, destaca la importancia de tener una visión integral que abarque desde la producción de la uva hasta la promoción del enoturismo. La industria vinícola de Aguascalientes, aunque pequeña en comparación con otros estados, tiene el potencial de destacarse por su calidad.
El consejo trabaja en tres pilares fundamentales: el campo, la transformación del vino y el enoturismo. La creación de infraestructura adecuada y la capacitación de profesionales locales son esenciales para lograr estos objetivos.
Además, la colaboración con la academia y la investigación es vital para impulsar la innovación y mejorar continuamente la calidad de los vinos producidos en la región. Casa de Quesada se compromete a trabajar arduamente para que Aguascalientes sea reconocido a nivel nacional e internacional como un referente de calidad en la industria vitivinícola. Con una visión clara y objetivos bien definidos, el futuro del vino en Aguascalientes promete ser brillante y lleno de oportunidades para quienes forman parte de esta apasionante industria.
