Viridiana Álvarez se describe a sí misma como una mujer de retos. Además de su empresa de consultoría, su pasión por el montañismo la llevó a plantearse una gran meta: terminar de subir las catorce montañas que superan los ocho mil metros —de las cuales lleva diez hasta el momento—. Hoy en día concentra su vida entre el montañismo y el coaching, donde echa mano de las mismas habilidades y valores para desempeñarse en sus actividades empresariales.
Viridiana está en el camino de romper el récord como primera mujer del continente americano en escalar todas las montañas, mayores a ocho mil metros, que hay en el mundo.
La decisión de Viridiana de incursionar en el montañismo fue paulatina, puesto que es un deporte costoso y que toma demasiado tiempo realizarlo (una expedición puede durar hasta siete meses).
“A veces se piensa que hay como un rayo de luz que llega y te dice ‘dedícate a esto, deja todo’. No fue así, fue paulatino. Yo creo que en ese ir abriendo camino es como se van descubriendo los objetivos[…] En mi caso, primero dejé el trabajo fijo, abrí mi empresa de consultoría, empecé a ir a una expedición al año y ahora estoy el 60% o 70% de tiempo en expediciones, pero fue poco a poco”, señala.
Montañismo y emprendimiento, mitos compartidos
En cuanto la relación que existe entre el emprendimiento y el alpinismo, Viridiana comenta que hay mitos que comparten:
“Uno de los mitos es que, siendo emprendedor o montañista, vas a tener más libertad; yo creo que los dos conllevan mucha incertidumbre. Otro tema es la paciencia, además de que se sabe que un emprendedor trabaja más horas que una persona en oficina. Es lo mismo en el montañismo: piensan que en la expedición vas de vacaciones, pero no. Hay mucho trabajo detrás para construir una empresa o llegar a una cima”, nos cuenta Viridiana.
La empresaria nos cuenta también que otro mito tiene que ver con el financiamiento y los objetivos base: “Se cree que el reto empieza cuando llegas al campamento base, y no, el reto empieza desde que decides ir a la montaña y tienes que conseguir todo el dinero. Entonces se requiere estrategia, planeación, confianza y saber soñar”.
Por otra parte, Viridiana nos cuenta que saber adaptarse a los cambios es una habilidad que se aprovecha de manera similar en ambas actividades:
“Adaptarse a los cambios en el emprendimiento (en la industria, la demanda, la tecnología) es muy similar a lo que pasa en la montaña: no sabes si viene una tormenta, cuánto va a durar[…] Hay que saber cambiar los planes, tener paciencia, aceptar que no siempre llegas a la cima”, comparte.
Conoce más sobre la trayectoria de Viridiana Álvarez:
Saber soñar, llegar al éxito
Saber soñar es fundamental para llegar al éxito. Para Viridiana, ponerse metas rigurosas, aparentemente inalcanzables, es fundamental tanto para el montañismo como para las actividades empresariales:
“Hay gente que ni siquiera se atreve a soñar en grande, que dice: ’no creo que vaya a ser la número 1’. Esa capacidad de soñar pauta nuestras acciones; no es lo mismo prepararse para correr 42 kilómetros que correr diez. El plan de entrenamiento cambia[…] Nadie te va a decir que te ve habilidades para subir el Everest, nadie te va a impulsar a hacerlo. Al contrario, es nadar contra corriente”, relata.
El rol del líder también es similar al subir la montaña o al dirigir una empresa. Viridiana Álvarez hace una analogía al respecto:
“El líder de expedición está a cargo de todos, igual que en una empresa. El líder debe de contener a todas las personas y asegurarse de que lleguemos a la cima y regresemos. Igual en la empresa: el líder no es el que lo hace todo, sino que es el que da el soporte al equipo que ya sabe qué hacer y hacia dónde va”, menciona.
Montañismo y emprendimiento, unir las pasiones
Para Viridiana Álvarez ha sido muy importante aprender a unir su formación profesional con sus pasiones, pues le parece grave que sólo el 20% de las personas está conforme o feliz con su trabajo. Le gustaría apoyar a la gente para que siga sus sueños y cultive sus pasiones:
“A mí me gustaría motivar a la gente a que cumpla sus propias metas, a que suban sus propias montañas […] Mi background profesional me ha servido muchísimo, me ayudó a saber hacer un plan de negocios, una estrategia y gestionar una proyección financiera para, cuando voy con un patrocinador, saber hacer un planteamiento. Esto me ha permitido superar retos que han detenido a personas que podrían subir tres veces más rápido que yo”.
Además de terminar de subir los ochomiles, a futuro, Viridiana tiene en puerta la publicación de un libro y continuar trabajando de cerca con sus patrocinadores, entre los que se encuentran Cimarrón y Flexi. Dichas empresas se han caracterizado por su apoyo comprometido a deportistas y atletas ejemplares como Viridiana. Por si fuera poco, la alpinista hidrocálida también lleva el desarrollo de un vino llamado “Entre montañas” y una posible marca de ropa y joyería.
Montañismo y emprendimiento: diferencias y similitudes según Viridiana Álvarez
Viridiana Álvarez se describe a sí misma como una mujer de retos. Además de su empresa de consultoría, su meta más próxima es terminar de subir las catorce montañas que superan los ocho mil metros —de las cuales lleva diez hasta el momento—. Hoy en día concentra su vida entre el montañismo y el coaching, donde echa mano de las mismas habilidades y valores para desempeñarse en sus actividades empresariales.
Viridiana está en el camino de romper el récord como primera mujer del continente americano en escalar todas las montañas, mayores a ocho mil metros, que hay en el mundo.
La decisión de Viridiana de incursionar en el montañismo fue paulatina, puesto que es un deporte costoso y que toma demasiado tiempo realizarlo (una expedición puede durar hasta siete meses).
“A veces se piensa que hay como un rayo de luz que llega y te dice ‘dedícate a esto, deja todo’. No fue así, fue paulatino. Yo creo que en ese ir abriendo camino es como se van descubriendo los objetivos[…] En mi caso, primero dejé el trabajo fijo, abrí mi empresa de consultoría, empecé a ir a una expedición al año y ahora estoy el 60% o 70% de tiempo en expediciones, pero fue poco a poco”, señala.
Montañismo y emprendimiento, mitos compartidos
En cuanto la relación que existe entre el emprendimiento y el alpinismo, Viridiana comenta que hay mitos que comparten:
“Uno de los mitos es que, siendo emprendedor o montañista, vas a tener más libertad; yo creo que los dos conllevan mucha incertidumbre. Otro tema es la paciencia, además de que se sabe que un emprendedor trabaja más horas que una persona en oficina. Es lo mismo en el montañismo: piensan que en la expedición vas de vacaciones, pero no. Hay mucho trabajo detrás para construir una empresa o llegar a una cima”, nos cuenta Viridiana.
La empresaria nos cuenta también que otro mito tiene que ver con el financiamiento y los objetivos base: “Se cree que el reto empieza cuando llegas al campamento base, y no, el reto empieza desde que decides ir a la montaña y tienes que conseguir todo el dinero. Entonces se requiere estrategia, planeación, confianza y saber soñar”.
Por otra parte, Viridiana nos cuenta que saber adaptarse a los cambios es una habilidad que se aprovecha de manera similar en ambas actividades:
“Adaptarse a los cambios en el emprendimiento (en la industria, la demanda, la tecnología) es muy similar a lo que pasa en la montaña: no sabes si viene una tormenta, cuánto va a durar[…] Hay que saber cambiar los planes, tener paciencia, aceptar que no siempre llegas a la cima”, comparte.
Saber soñar, llegar al éxito
Saber soñar es fundamental para llegar al éxito. Para Viridiana, ponerse metas rigurosas, aparentemente inalcanzables, es fundamental para sus dos actividades principales:
“Hay gente que ni siquiera se atreve a soñar en grande, que dice: ’no creo que vaya a ser la número 1’. Esa capacidad de soñar pauta nuestras acciones; no es lo mismo prepararse para correr 42 kilómetros que correr diez. El plan de entrenamiento cambia[…] Nadie te va a decir que te ve habilidades para subir el Everest, nadie te va a impulsar a hacerlo. Al contrario, es nadar contra corriente”, relata.
El rol del líder también es similar al montañismo o al dirigir una empresa. Viridiana Álvarez hace una analogía al respecto:
“El líder de expedición está a cargo de todos, igual que en una empresa. El líder debe de contener a todas las personas y asegurarse de que lleguemos a la cima y regresemos. Igual en la empresa: el líder no es el que lo hace todo, sino que es el que da el soporte al equipo que ya sabe qué hacer y hacia dónde va”, menciona.
Montañismo y emprendimiento: Viridiana Álvarez une sus pasiones
Para Viridiana Álvarez ha sido muy importante aprender a unir su formación profesional con sus pasiones, pues le parece grave que sólo el 20% de las personas está conforme o feliz con su trabajo. Le gustaría apoyar a la gente para que siga sus sueños y cultive sus pasiones:
“A mí me gustaría motivar a la gente a que cumpla sus propias metas, a que suban sus propias montañas […] Mi background profesional me ha servido muchísimo, me ayudó a saber hacer un plan de negocios, una estrategia y gestionar una proyección financiera para, cuando voy con un patrocinador, saber hacer un planteamiento. Esto me ha permitido superar retos que han detenido a personas que podrían subir tres veces más rápido que yo”.
Además de terminar de subir los ochomiles, a futuro, Viridiana tiene en puerta la publicación de un libro y continuar trabajando de cerca con sus patrocinadores, entre los que se encuentran Cimarrón y Flexi. Dichas empresas se han caracterizado por su apoyo comprometido a deportistas y atletas ejemplares como Viridiana. Por si fuera poco, la alpinista hidrocálida también lleva el desarrollo de un vino llamado “Entre montañas” y una posible marca de ropa y joyería.
